Se os ve llegar,
crecer, madurar,
y como pájaro
que ansía libertad
dejáis el nido,
quitáis cadenas,
rompéis ataduras,
y nosotros quedamos
en nuestro mundo de niños.
Nuestra cara se surca de arrugas,
nuestro pelo se puebla de canas,
nuestra mente se esfuerza
por no envejecer.
Pasa el tiempo
y nosotros quedamos
en nuestro mundo de niños,
quitáis cadenas,
rompéis ataduras,
y se os ve marchar,
marchar, marchar.
Hace días mi amigo Francisco, en su blog Dias de aplomo , publicó una entrada en la que hacía referencia al paso del tiempo y me peguntaba como lo veíamos nosotros, los profesores. Busqué, entre mis papeles, y salió esto que tenía escrito hace bastante tiempo y que puede servir de contestación
Hace días mi amigo Francisco, en su blog Dias de aplomo , publicó una entrada en la que hacía referencia al paso del tiempo y me peguntaba como lo veíamos nosotros, los profesores. Busqué, entre mis papeles, y salió esto que tenía escrito hace bastante tiempo y que puede servir de contestación
Texto : Chelo
10/3/1999
Mi tiempo mas bonito la infancia sin duda.. recuerdo a una maestra la primera de mi parvulario y la recuerdo por dos cosas porque tenia un problema en el cuello y a veces me daba algun caramelo.. no he olvidado su nombre y confieso que me habria gustado volver a verla.
ResponderEliminarMujer alta rubia y se llamaba Mª Luisa es de suponer que a estas alturas ya esté en el cielo
Me has puesto a reflexionar. Efectivamente, todo la que expresaste en tu escrito es verdad, ¡qué bueno que lo sacaste y lo publicaste! ¡Cúantas cosas mas tendrás guardadas que nos harían pensar en la felicidad de haber nacido y llegado a la edad en la que valoramos todos los pensamientos positivos! Un saludo.
ResponderEliminarEs verdad Tini, normalmente se tienen recuerdos de los maestros que se tuvieron de pequeños y los que se tuvieron de mayores pasan al olvido sin pena ni gloria .
ResponderEliminarLo digo por la experiencia de haber trabajado siempre con niños de 12 años para arriba.
Gracias Anónimo por comentar , pero me gustaria saber quien eres
ResponderEliminarEs ley de vida Chelo, el tiempo pasa para todos, para los niños que curso a curso enseñaste en la escuela, también.
ResponderEliminarTe felicito por el poema.
Un beso.
Así es, Chelo, así es. Tal y como tú lo has expresado. Me identifico plenamente con el poema.
ResponderEliminarSaludos
Es así Chelo, el paso del tiempo nos da todo eso, pero además fluidez y tranquilidad si la sabemos acoger, pues vamos acogiendo las cosas de otra forma y creando sabiduría en nuestra vida, sabiduría que vamos descubriendo y que nunca se acaba de saber.
ResponderEliminarUn abrazo Chelo, aún con canas y arrugas no dejamos nunca de ser seres maravillosos y nuestros actos son los que verdaderamente nos descubren.
Recuerdo en mi adolescencia, que al final del curso pensaba en esos profesores que tenían que empezar otra vez al año siguiente, mientras los alumnos íbamos quemando etapas... hoy sé que la gratificación por esplicar conceptos en jóvenes distintos, es una motivación espléndida.
ResponderEliminarPrecioso y lleno de verdad, Chelo. Me ha encantado!
ResponderEliminarQuerida Chelo:
ResponderEliminarRealmente muy bello tu poema; mi infancia la tengo idealizada y recuerdo la clase de jardinera como la más feliz.
Creo que todo el blog es un auténtico poema.
Felicitaciones y un abrazo enorme de Iris
Chelo, como dice Elena, el tiempo pasa para todos, pero creo que pasa demasiado rápido. Cuando menos he acordado me he puesto en los sesenta y no me he dado cuenta. Un beso grande amiga.
ResponderEliminarHola Chelo he vuelto medio mejor. El tiempo pasa, y la vida sigue, las etapas se repiten aunque los pupitres los ocupan caras nuevas, hasta que das cuenta que tu sitio también la ha pasado y hoy la ocupa otra cara más jóven.
ResponderEliminarUn beso
Es reconfortante comprobar cómo en esta sociedad tan materialista, algunos profesores sienten su vocación de esta manera. Gracias Chelo por habernos hecho partícipes de este hermoso poema.
ResponderEliminarCordialísimos saludos
Que lindo poema. Tan linda como debe ser la vida del que se dedica a la educación , con ganas, por vocación. Ese debe ser tu sentido, por eso tan buena inspiración.
ResponderEliminarUn saludo desde Buenos Aires.
mariarosa
y se os ve marchar,
ResponderEliminarmarchar, marchar......Chelo ya veo que los poemas son tuyos....he estado tanto tiempo desconectada! precioso poema no sabia que tenias este don...una buena sorpresa y un abrazo
Precioso. Me ha encantado la profundidad con que describes ese paso del tiempo, a veces lento, a veces rápido, tan veloz que da vértigo.
ResponderEliminarUn beso.
CHELO, POR EL POCO TIEMPO QUE TUVE DE ESCOLARIDAD,
ResponderEliminarno tuve muchas profesoras, pero las que tuve, me querían mucho, porque me gustaba aprender, y todo lo preguntaba.
Me hubiera gustado ser tu alumna...
Besos
Leonor
Que tal..! después de un tiempo de ausencia paso a saludarte!
ResponderEliminarte dejo un fuerte abrazo!
Sentimiento que comparto al cien por cien!
ResponderEliminarEsto nuestro se lleva dentro o no se lleva.
Y verlos partir, cuando tenemos alumnos más o menos de esas edades, cuesta muchísimo. Yo me llevo unas cuantas lloreras a mis espaldas ya!
Ay!
Ya te tengo vista y visitada no te creas, pero mira, te acabo de encontrar hace un momentito en la Orilla, ahí, chapoteando, así que ya, sin vergüenza me acerco, cojo la tiza y en la pizarra te dejo estas palabritas!
Gracias por tu visita, profa!
Besos!
;)